Con todos los sentidos puestos, este cuadrúpedo está a la guardia de cualquier malhechor que quiera entrometerse en la vivivienda de sus amos. Sus patas firmes se entierran entre el terreno que por falta de recursos carece de un cemento firme. A la guardia ante todo se encuentra el animal al estar agradecido por tener una guarida en aquel humilde hogar.