Más que un trabajo es su pasatiempo, ya que desde pequeño le inculcaron el gusto por el V.W. Hoy se gana la vida no sólo plasmándolo en un papel, sino en camisetas y gorras, con diseños exclusivos e irreverente que sólo él tiene en la mente. El Volkswagen no sólo se convirtió en una marca comercial de automóviles sino de accesorios y prendas.